El sushi es el plato gastronómico más popular de Japón y su base, como muchas de las comidas asiáticas, es el arroz. Pero el arroz utilizado en sushi no un arroz cocido simplemente, sino que está aliñado con vinagre y la forma de cocinarlo es muy especifica, aunque existen variedades según la receta.
A continuación, os vamos a mostrar una forma de hacer arroz japonés para que lo podáis acompañar con verduras, con carne o hacer sushi.
Para que nos salga un arroz con una buena textura es necesario utilizar arroz especial para sushi, ya que difiere de otros como el bomba, basmati o el integral. Y no sólo este aspecto tenemos que tener en cuenta, sino que para no dañar el delicado sabor del arroz es recomendable utilizar utensilios que no sean de metal, sino de madera y vidrio.
Para cuatro adultos, 600 gramos de arroz deben ser suficiente. Antes de hervirlo hay que lavarlo para quitarle un almidón. Para ello, puedes meterlo en un colador e introducirlo en un bol de agua fría. Deberás darle varios baños, cuatro o cinco, hasta que el agua comience a clarear. Utiliza tus manos para remover el arroz y que el almidón salga mejor.
Después, es necesario dejar escurrir durante al menos treinta minutos.
Para hervir el arroz deber colocar la misma cantidad de agua que de arroz, por lo que si tenemos 600 gramos, necesitamos 600 mililitros de agua. Utiliza una olla con tapa transparente o una especial para el arroz y deja el agua con el arroz tapado y a fuego alto. Cuando veas que está hirviendo, deja que pasen siete minutos y después déjalo al mínimo durante 15 minutos sin levantar la tapa en ningún momento. Al sacarlo observarás que algunos granos se han quedado pegados en el fondo de la olla. Es normal. Ese arroz no lo utilizaremos.
El siguiente paso es dejar enfriar el arroz. Éste debe enfriarse lo más rápidamente posible. Extiende el arroz en una superficie y abanícalo para acelerar el proceso.
Mientras se enfría, vamos a preparar el siguiente ingrediente del arroz: el ‘su‘. Para ello, necesitamos vinagre de arroz, sal y azúcar. Con esto dejaremos un sabor aromatizado y una textura más pegajosa. Ten en cuenta que para cada 100 ml de vinagre es necesario añadir tres cucharadas de azúcar y una y media de sal. Vierte estos ingredientes en una olla y calienta mientras lo mezclas hasta que se quede disuelto.
Es el momento de mezclar el arroz con nuestro preparado de vinagre. Para ello, pon el arroz en una superficie de madera y mezcla bien con una pala de madera. Ten cuidado de no aplastar el arroz. Vierte la mezcla poco a poco, probando el sabor cada vez para que no quede ni soso ni salado ni dulce.
¡Y ya está listo! Recuerda que el arroz japonés está mejor recién hecho y a temperatura ambiente. Si tienes que refrigerarlo puedes recalentarlo junto a una hoja de lechuga para que no se seque.
Fuente: InterMundial Seguros